Era viernes 12 de noviembre por la noche y ya estaba todo listo. Briones llamaba a Roman y Alejo para acabar de concretar a que hora quedàbamos, mientras yo buscaba en el armario la dichosa culera entre toda la ropa de invierno.
No sé a que hora me acosté pero era tarde y una vez en la cama me costo rato dormirme. Una situación similar a la de un niño que no puede dormir ya que espera su cumpleaños.
Tan importante era ponerme unos skis en los pies? Parece ser que si...
Sonó la alarma del movil a las 9:00am y, a diferencia de los dias de clase, en menos de diez minutos ya estaba vestido y listo para salir. A Briones le costó un poco más porque tubo un dilema con la vestimenta (dudaba entre una 5XL o una 6XL).
Porfín salimos de casa y al pasar por Vielha recogimos a Oscar, a Borja y a Felipe, que solo verles las caras me dí cuenta que no era el único con unas ganas locas de ripar.
A los dos minutos de llegar a Beret, empezaron a aparecer los demás: Kitos, Pol, Espí, Marc, Xampi, Roman, Laurenç, David, Alejo y alguno otro que mi memoria no puede recordar.
Todos nos calzamos las botas y cargamos con los módulos monte arriba, subimos hasta que encontramos una loma perfecta donde mortarlo todo, y aquí empezó el juego.
sábado, 21 de noviembre de 2009
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